4.1CONCEPTOS
Sonido: fenómeno físico que estimula el sentido del oído debido a vibraciones del medio que llegan al oído interno. Estas vibraciones llegan al oído interno transmitidas a través del aire, y a veces se restringe el término ‘sonido’ a la transmisión en este medio. Sin embargo, en la física moderna se suele extender el término a vibraciones similares en medios líquidos o sólidos.
Frecuencia: término empleado en física para indicar el número de veces que se repite en un segundo cualquier fenómeno periódico. El hercio (Hz) es una unidad de frecuencia que corresponde a un ciclo por segundo. El espectro de frecuencias audible varía según cada persona, edad, etc. Sin embargo normalmente se acepta como el intervalo entre 20 Hz y 20000 Hz.
Tono: El tono es la característica del sonido que indica su altura. Los cambios de tono vienen originados por diferencias de frecuencia de la onda sonora, medida en ciclos por segundo. A medida que aumenta la frecuencia también lo hace el tono y la nota es más aguda.
Timbre: Si el tono permite diferenciar unos sonidos de otros por su frecuencia, y la intensidad los sonidos fuertes de los débiles, el timbre completa las posibilidades de variedades del arte musical desde el punto de vista acústico, porque es la cualidad que permite distinguir los sonidos producidos por los diferentes instrumentos.
Intensidad: Es la cualidad que permite distinguir entre sonidos fuertes o débiles. Cuanto más grande es la amplitud de la onda, más intensamente golpean las moléculas en el tímpano y más fuerte es el sonido percibido. La amplitud mínima para que un sonido sea percibido por una persona se llama linde de audición. Cuando la amplitud aumenta, llega un momento en que produce molestias en el tímpano, a eso se le llama linde del dolor. Además de la amplitud en la percepción de la intensidad, influye la distancia a que se encuentra situado el foco sonoro del oyente y la capacidad auditiva de este.